jueves, 24 de julio de 2008
Que la tortilla se vuelva
Primero quiero separar la definición del Agustín Gabriel que pone textualmente “el comunismo/socialismo o cualquiera de estas doctrinas son nefastas para la condición y la dignidad humana”. Muy bien, acá podemos barajar 2 términos, que no son doctrinas, por un lado comunismo y por el otro socialismo, lo cual sabemos que hay muchas diferencias entre ellos, y que a la vez lo podemos mechar con marxismo. La primera confusión que siempre aparece es entre comunismo y marxismo, o con la vieja idea de que Marx inventó el comunismo. Son dos cosas diferentes que obviamente están relacionadas entre ellas. El modo de producción comunista, como su nombre lo indica, fue la primer forma de producción que el hombre pudo desarrollar en la época de la caza y la recolección de frutos, pero con la aparición de la agricultura y del elemento denominado excedente, las cosas empezaron a cambiar radicalmente. Las características del comunismo es la ausencia de propiedad privada, ni que hablar de la propiedad estatal, y su modificación por la propiedad común, o propiedad social de los medios de producción. En la sociedad comunista, no hay división de clases. El término comunista es utilizado por primera vez a comienzos de la década del ´20 del siglo XIX por el autor socialista utopista inglés, Robert Owen. Para ese entonces, los términos socialista y comunista eran sinónimos, términos que luego de varios años, se les dan una correcta diferenciación por parte de Lenin, diciendo que el socialismo es un estadio entre el traspaso de la sociedad capitalista hacia la sociedad comunista. Por eso los países que formaron parte durante muchos años del siglo XX del bloque soviético, mal llamados comunistas por personajes ignorantes, eran conocidos como Unión de Repúblicas SOCIALISTAS Soviéticas o URSS.
Pero hay indicios que la idea de la sociedad comunista aparece durante la época de la Francia revolucionaria y jacobina, con personajes como Jacques Roux, alias “El cura rojo”, y el movimiento revolucionario denominado “Conspiración de los iguales” que se desarrollo entre 1795-1796 de la mano de Babeuf que decía: "No queremos la igualdad escrita en una tabla de madera, la queremos en nuestras casas, bajo nuestros techos.", como reacción a la Declaración de los Derechos del Hombre y el Ciudadano de 1789. Las ideas babeuvistas al igual que la Conspiración de los Iguales fue salvajemente reprimida por parte del gobierno y de Napoleón, pero sus ideas no desaparecieron con el paso del tiempo y fueron retomadas por socialistas pseudo comunistas como Blanqui junto con ideas de Robert Owen, Charles Fourier Y Saint-Simon. Junto con ellos aparece la idea de que se puede ser comunista sin ser necesariamente marxista, idea que nuevamente es afirmada por el anarco comunismo, o socialismo libertario de Kropotkin, Berkman, Errico Malatesta, entro otros. Ideas como la necesidad de exaltar la fraternidad humana, remplazar el afán de lucro, la socialización de la propiedad y la supresión del derecho de herencia empiezan a aparecer hacia 1760 con Saint-Simón.
Hay muchas diferencias entre el socialismo utópico y el socialismo científico o marxismo (primero quiero destacar las diferencias entre marxismo y comunismo. Marxismo es un método de análisis económico-político enfocado sobre la sociedad capitalista. Marx no detalla en como va a ser la sociedad comunista ya que es una sociedad que el no conoce y no puede dan a ciencia cierta ninguna característica importante, lo que Marx explica y su obra se basa en ello, es en como va a ser el traspaso de la sociedad capitalista hacia la sociedad comunista, que cosas deben y no deben hacerse. El marxismo básicamente es un programa de acción política basado en la crítica del capitalismo), una de ellas es que el socialismo utópico se basa en la concepción ética del hombre, afirmando que este es bueno por naturaleza, pero se pervierte por el sentimiento posesivo que genera la propiedad privada. Los utopistas proponen una serie de ideales que la verdad son muy bellos al oído y a la mente, y generan en uno ese mundo fantástico con el que soñamos a diario y que hace que nuestros estómagos se estremezcan de placer, peor no dicen como hacer para llevarlo a cabo, como hacer para realizar efectivamente esa quimera. Por otro lado, el marxismo logra tomar cuerpo en el terreno político en forma de partidos orgánicos y por sobre todo en lo económico, que es en donde básicamente fundamenta toda la teoría, a diferencia de los utopistas que no le dan la importancia necesaria al aspecto económico. Por eso la dominación de científico, ya que la política no es una ciencia, como creía Weber, sino un arte, y como arte no hay reglas matemáticas, característica que si puede encontrarse en el área económica de donde se apoya el marxismo. Otra diferencia considerable es que los marxistas no le dan a la ética la carga importante que sí le dan los utopístas. Y para finalizar, la diferencia principal es que el socialismo utópico no considera que la sociedad capitalista esté compuesta por clases sociales antagónicas entre sí.
Segundo, por lo que habrán leído anteriormente, nunca se pudo llegar en los tiempos actuales a una sociedad netamente comunista, salvo con la Comuna de París, que fue el intento mas fuerte pero que duró lamentablemente muy poco. Por lo tanto Cuba, China, Vietnam, la URSS, etc., no fueron, ni son comunistas, porque minimamente, para que lo sean, no tendría que haber Estado. Lo que si, los podríamos denominar socialistas, por el papel que juega el Estado en sus economías, pero aclarando que todas tienen su propio socialismo por las circunstancias históricas diferentes. Otro tema para analizar es como la mayoría de la población intente justificar la caída de la Unión Soviética como la caída del comunismo y el único intento revolucionario de establecer una sociedad de iguales. Con respecto al tema de las purgas, obviamente no lo vamos a negar ya que las purgas estalinistas existieron y está comprobado empíricamente e históricamente. Condenamos con todo nuestro ser a ese tipo de manejo político genocida, pero cabe destacar que la historia no ronda en un hombre, hubo todo un aparato mundial que apoyó ese tipo de actitudes. No es casualidad que personajes como Stalin, Hitler y Mussolini hayan aparecido en el mismo momento (para mas información lean sobre la serie de tratados entre Mussolini y la Santa Iglesia Católica del año 1929, denominados “Pactos de Letrán” en donde se reconoce una serie de características en las que se reconoce la independencia y soberanía de la Santa Sede y la creación del Estado de Vaticano.
Cuando el muchacho que justifica absolutamente toda su creencia en factores y seres sobrenaturales y verticalistas en frases bíblicas y videos extraños de poco valor empírico afirmando lo contrario, a uno le resulta mas que tragicómico. Uno como marxista utiliza el método científico como herramienta para hacer un análisis de la realidad social, política y económica. También frente a lo que cree la mayoría de esclavos de la Virgen y del Jesús judío, el marxismo no reconoce la situación económica del hombre como única, el mismo Marx lo afirma, pero sí como aspecto fundamental ya que es determinante para el pensamiento de una persona, la infraestructura económica es determinante para la superestructura ideológica. Por lo tanto no vamos a ponernos en el papel de las corrientes políticas economicistas que reducen al marxismo al “factor económico”. Otro aspecto, el de que si Gramsci buscó un sacerdote o no al final de su vida, es un aspecto netamente personal de la vida del gran Antonio, que no tiene ninguna relación con la vida política de este genio, ni con su pensamiento.
Mas adelante explayaré mi trabajo netamente sobre el marxismo.
Hay un fantasta que recorre América...
lunes, 21 de julio de 2008
Que dirá el Santo Padre que vive en Roma, que le están degollando a su paloma
“Yo quiero vengarme de aquel que reina por encima de nosotros.”Esta es una frase, dicha por Marx durante su época en la Universidad, fue desarrollada por su lectura de Feuerbach.
Antes que anda me gustaría por empezar diciendo que hay una gran diferencia entre religión y espiritualidad. Ésta es el conjunto de características relacionadas con la vida espiritual, en cambio la religión es el lucro de la espiritual, la religión genera una alienación en el hombre, en donde no lo deja ver, le nubla la mente, de las diferencias de clase, de la explotación, de la injusticia social. La religión en si misma encarna la alineación económica en donde no deja que el hombre tome conciencia de clase, lo hace enfocarse en un mundo mas allá, un mundo inexistente, gobernado por un ser superior, en el cual él como hombre en contacto con la naturaleza no puede manejar ni transformar, generando que pierda su esencia de hombre. Es el opio que adormece al pueblo.
Los que somos ateos y marxistas o los que no necesariamente niegan a Dios, sino que lo resumen como un ser que no tiene ninguna relación y/o poder con respecto a nosotros, que lo vuelven en una nada total, no negamos la espiritualidad, lo que negamos es que se pierda de vista lo importante, que se pierda de vista la explotación y la búsqueda de liberación por cualidades espirituales abstractas en la vida humana. Pero tenemos que luchar contra estructuras que están fuera de nuestro alcance como la “Santa Iglesia Católica” en la cual está a la cabeza el Benedicto XVI, ex Joseph Ratzinger de las juventudes hitlerianas, donde tuerce el socialismo científico, al igual que su predecesor, en frases como: “Recordemos que el ateísmo y la negación de la persona humana, de su libertad y de sus derechos, están en el centro de la concepción marxista. Esta contiene pues errores que amenazan directamente las verdades de la fe sobre el destino eterno de las personas. Aún más, querer integrar en la teología un ‘análisis’ cuyos criterios de interpretación dependen de esta concepción atea, es encerrarse en ruinosas contradicciones. El desconocimiento de la naturaleza espiritual de la persona conduce a subordinarla totalmente a la colectividad y, por tanto, a negar los principios de una vida social y política conforme con la dignidad humana”. ¿La Iglesia Católica se atreve a hablar de libertad, derechos y dignidad humana?, ¿La Iglesia que no solo quemó gente viva, sino que tardó 200 años en darse cuenta que los pueblos originarios de América tienen alma y no son animales?, ¿La Iglesia Católica que acumuló capital gracias a la explotación de las minas latinoamericanas, como las del Potosí, condenando a pueblo a la miseria sistemática?, ¿ La Iglesia Católica con sus fieles que van todos los domingos a escuchar hipnotizantes sermones sobre como ser buen hermano y prójimo, en esas hermosas estructuras, y poder poner su caridad y así pagar para limpiarse la conciencia y decis "Yo ayudo"?, ¿ La Iglesia Católica, la cual dice que las cusas del mal en el mundo es consecuencia de que el hombre sea libre y responsable y que las estructuras económicas, sociales o políticas se derivan es esto?.
Pero compañeros, gracias a esta Iglesia retrógrada, fascista, asesina, a la cual voy a combatir hasta que deje de correr sangre en mi venas, que conoció en carne propia y dentro de ella misma a un sector combativo que le hace la guerra desde hace 50 años, pudimos leer sobre la "Teología de la Liberación", una rama del cristianismo en la cual se une las enseñanzas de Jesús con la doctrina marxista de liberación de los pueblos y las luchas emancipatorias latinoamericanas. El mismo Fidel la reconoció cuando en una larga charla con Frei Betto ("Fidel y la religión", Editorial Ocean Sur), llegaron a la conclusión de que hay más relación entre el cristianismo con el comunismo, que con otro sistema político. Los teólogos de la liberación lo que afirman es que:
- La salvación cristiana no puede darse sin la liberación económica, política, social e ideológica, como signos visibles de la dignidad del hombre.
- Eliminar la explotación, las faltas de oportunidades e injusticias de este mundo.
- Garantizar el acceso a la educación y la salud.
- La liberación como toma de conciencia ante la realidad socioeconómica latinoamericanala pobreza es un pecado social.
- Tomar conciencia de la lucha de clases optando siempre por los pobres.
- Afirmar el sistema democrático profundizando la concientización de las masas acerca de sus verdaderos enemigos para transformar el sistema vigente.
- Crear un "hombre nuevo" como condición indispensable para asegurar el éxito de la transformación social. El hombre solidario y creativo motos de la actividad humana en contraposición a la mentalidad capitalista de especulación y espíritu de lucro.
- La libre aceptación de la doctrina evangélica, es decir, primeramente procurar a la persona unas condiciones de vida dignas y posteriormente su adoctrinamiento evangélico si la persona quiere (algo que la Iglesia Romana nunca hizo).
Entonces camaradas, cabe destacar que hay sectores combativos en el cristianismo, pero que son condenados por las jerarquías eclesiásticas en los "Libertatis Nuntius" y "Libertatis Conscientia" de los años 1984 y 1986 respectivamente, escritas por Ratzinger, durante el reinado de Juan Pablo II. Fueron varias las conclusiones que sacaron los mandamases y el sucesor de San Pedro:
- Desde un punto de vista teológico, el análisis marxista no es una herramienta científica para el teólogo (¿Desde cuándo la visión teleológica y la científica tienen relación?), que debe, previo a la utilización de cualquier método de investigación de la realidad, llevar a cabo un examen crítico de naturaleza epistemológica más que social o económico.
- El marxismo es, además, una concepción totalizante del mundo, irreconciliable con la revelación cristiana, en el todo como en sus partes.
- Esta concepción totalizante impone su lógica y arrastra las "teologías de la liberación" a un concepto de la práxis que hace de toda verdad una verdad partidaria, es decir, relativa a un determinado momento dialéctico.
- La violencia de la lucha de clases es también violencia al amor de los unos con los otros y a la unidad de todos en Cristo; es una concepción puramente estructuralista, para legitimar esa violencia.
- Decir que Dios se hace historia, e historia profana, es caer en un inmanentismo historicista, que tiende injustificadamente a identificar el Reino de Dios y su devenir con el movimiento de la liberación meramente humana, lo que está en oposición con la fe de la Iglesia.
- La politización de las afirmaciones de la fe y de los juicios teológicos lleva a la aceptación de que un hombre, en virtud de su pertenencia objetiva a1 mundo de los ricos, es, ante todo un enemigo de clase que hay que combatir.
- La nueva hermenéutica de los teólogos de la liberación conduce a una relectura esencialmente política de la Escritura y a una selectividad parcial y mendaz en la selección de los textos sacros, desconociendo la radical novedad del Nuevo Testamento, que es liberación del pecado, la fuente de todos los males.
Pero lo más llamativo de la religión, en particular, la Católica Apostólica Romana, debido a que esta invade mi vida diariamente, ya que vivo en un país en donde esta visión del mundo es la religión de Estado, es que no cumplió el ciclo prometido por la Modernidad sobre la laicicidad del Estado. La religión es un aspecto de la vida privada de cada uno de los seres humanos, es un aspecto que se tiene que practicar puertas adentro, en donde no tendría que afectar las decisiones de nuestros gobernantes ni la moral política, como profesaba el genio de Maquiavelo hace 500 años. Lo podemos notar en países como Estados Unidos, en el cual los que están a cargo del poder justifican todas sus acciones en la Biblia de origen protestante, o también en las naciones del Medio Oriente como Irán con su revolución islámica que puso fin a los nacionalismo árabes de Egipto o de Irak. Por lo tanto para finalizar voy a tomar una frase que se utilizó hace bastante tiempo por los sectores peronistas de izquierda, a los cuales respeto mucho que es, “La única Iglesia que ilumina es la que arde”. Después seguiré. Amén.
jueves, 15 de mayo de 2008
¿Hay un giro a la izquierda en América Latina?
Continuando con la pregunta que nos hacíamos al principio, se podría afirmar que hay un giro a la izquierda de los países latinoamericanos en general, pero lejos estamos de gobiernos con fuerte influencia marxista-leninista, con excepción de Bolivia, Ecuador, Cuba y Venezuela. Tomando como punto de partida Argentina con Néstor Kirchner y su mujer, la actual presidenta Cristina Fernández vamos a desarrollar nuestra pregunta. Como todo gobierno justicialista de tendencia peronista, esta repleto de contradicciones. Se lo categorías como un gobierno de izquierda y realmente promueve cambios sociales pero utilizando elementos de la derecha y a veces hace todo lo contrario y beneficia a los grandes monopolios y empresarios. Un ejemplo claro es la “pelea” con el grupo Clarín. Después de que durante toda la Presidencia de Kirchner y a pesar de que se lo beneficiara al Grupo Noble con mayores concesiones y aumentase su cartera monopoliza, se comienzan a “pelear” por razones poco claras y de repente el gobierno de Cristina Fernández se da cuenta que la “Ley de Radiodifusión Pública” que viene desde la época de las botas, no solo es antidemocrática sino que también beneficia a los grandes medios de comunicación formadores de pensamientos y conciencia. ¿Acaso no fue Kirchner quien se encargo en no solo elogiar durante los ´90 al vende patria de Menem, sino que también fue uno de los encargados de la privatización de YPF? Ah no, solamente Repsol le banco económicamente la campaña para presidente. No nos olvidemos del tan amado y necesitado tren bala. Porque obviamente las clases populares, y la poca clase media que no es asquerosa, sanguinaria y menemista, les va a convenir un tren que le salga entre $400y $600 el viaje y no tener que seguir viajando al laburo en el tren Roca, o en el Sarmiento. ¡Uh que boludo!, me olvide de que el tren bala no va a ir hasta Morón o Glew. Eso si que es distribución de la riqueza. Así, ejemplos de este tipo hay a montones en los gobiernos que estamos teniendo, pero así también hay en América Latina.
¿Lula no es uno de los presidentes que están a favor de la utilización de los agro combustibles en detrimiento de las clases baja? ¿Tabaré no es quien no solo lucha a favor de multinacionales como Botnia, sino que promueve la exportación sin control desde el Uruguay y un capitalismo de rostro humano? Y ni la pena vale hablar de Uribe el perrito de Vds. en el Cono Sur, que le gusta ir bombardeando países ajenos y después pide perdón.Bueno me canse de escribir, después viene la parte 2 donde trataremos mas del gobierno “Montonero” y de los demás países latinoamericanos.
Socialismo o Muerte